Una campaña del Ayuntamiento isorano y de la Comisión de Fiestas promueve la declaración como atractivo turístico de esta exhibición pirotécnica cuya primera referencia histórica data de 1925. La noche de fuegos se celebrará el lunes 15.
Casi 800 kilos de material pirotécnico reglamentario (NEC, como se denomina técnicamente) iluminarán el próximo lunes 15 de agosto a partir de las 12 de la noche el cielo, el mar y la bahía de Alcalá durante la exhibición pirotécnica denominada “Noche de fuegos”, espectáculo que tendrá una duración de entre 30 y 35 minutos aproximadamente. Así lo aseguran representantes de la Comisión de Fiestas de Alcalá 2016, responsables de los festejos en honor a la Virgen de Candelaria, que este año destinarán el 25% del presupuesto total de las fiestas para sus afamados fuegos artificiales. “Se podrán ver fuegos en el cielo desde 6 puntos distintos –incluso desde la conocida ‘Isla del Amor’-, además de los acuáticos” apuntan.
Casi un siglo lleva este pueblo de Guía de Isora atrayendo visitantes de toda la isla, de otras partes de Canarias, e incluso de la Península y del extranjero, a sus fiestas en honor a la patrona, con el reclamo principal de los fuegos artificiales, que cada año se celebran el 15 de agosto. Una exhibición de luz, color y sonido de las más importantes de Tenerife y “probablemente también de Canarias”, según reconoce el representante de la pirotecnia Piromart S.L.U., Marco Antonio Toste.
Toste asegura que los fuegos de Alcalá, por su vistosidad y montante económico están a la altura de otros tan conocidos como los de Los Realejos, Tejina, Puerto Santiago o La Caleta de Interián en Garachico. “Son de los más vistosos, y sin duda los más complicados de montar, ya que tenemos que adaptarnos al terreno, donde casi no hay zonas llanas” asegura. La gran mayoría del material hay que cargarlo en barcas y llevarlo hasta las bajas (formaciones lávicas de la bahía del pueblo), además de llevar miles de sacos de arena, de entre 20 y 30 kilos de peso cada uno, para asegurar y calzar las carcasas desde las que se lanzarán los fuegos con seguridad sobre las rocas.
Para realizar el trabajo de llenar y llevar los sacos de arena a las bajas la comisión de fiestas de este año ha contratado a 3 personas durante varios días. Para ello utilizan una embarcación conocida en el pueblo como ‘La Patera’. Las labores comenzaron el pasado martes día 9 y se prevé que finalicen el mismo lunes 15. Se calcula que este año serán necesarias unas 5.000 bolsas de arena.
Este año es la primera vez que los fuegos de Alcalá corren a cargo de la Pirotecnia Piromart de Telde en Gran Canaria, pero a través de su representante en Tenerife, Marco Antonio Toste del Castillo, experimentado foguetero del municipio de Los Realejos que conoce muy bien el complejo montaje de los fuegos de Alcalá por los muchos años que ha estado al frente de ellos. “Los castillos de fuegos de Alcalá de este año tendrán entre 50-60 efectos diferentes: palmeras, figuras, intermitentes, dalias, abanicos o sombrillas de distintos colores y tamaños son algunos ejemplos” adelanta Toste que define el montaje “como una combinación variada y homogénea” de la que esperan, al final de los 30-35 minutos que durará, arrancar el aplauso del público. Toste aclara que “la duración dependerá de si corre brisa que ayude a disipar el humo que generan las explosiones en el cielo, lo que permitirá acelerar o retrasar el ritmo”.
Los fuegos se tiran habitualmente de cuatro puntos: la Baja de Afuera, la Baja Larga, Baja de Tierra y desde el muellito de la vieja fábrica de conservas. Este año a esos cuatro puntos se han añadido dos nuevos, La Escalerita y la Isla del Amor, por lo que en varios momentos de la exhibición pirotécnica se podrán ver fuegos en el cielo lanzados desde seis puntos al mismo tiempo. Tampoco faltarán como cada año los tradicionales fuegos acuáticos que explotan sobre el agua.
Dispositivo de seguridad y consejos.-
La Policía Local de Guía de Isora tiene a punto su dispositivo especial para las fiestas de Alcalá, y en especial para la noche de los fuegos del lunes 15, cuando acuden miles de personas a presenciarlos. “El amplio despliegue de medios se realizará en coordinación con la Guardia Civil, Cruz Roja, Servicio del 112 del Gobierno de Canarias, Asociación de Emergencias Anaga (AEA) y Bomberos Voluntarios de Guía de Isora”, según informa la concejal de Seguridad Ciudadana, Ángeles González.
El Ayuntamiento de Guía de Isora recuerda a los vecinos y visitantes las recomendaciones que se han establecido en los últimos años, motivadas por la gran afluencia de público. Estos consejos se refieren fundamentalmente al tráfico rodado. Para evitar en lo posible las retenciones y problemas de aparcamiento es recomendable la utilización de los servicios de transporte público, guaguas y taxis. Llegar al lugar con bastante antelación puede ahorrar también algún disgusto y muchos nervios.
Campaña de promoción.-
Dada la singularidad de los fuegos de Alcalá y su dilatada tradición, el Ayuntamiento de Guía de Isora y la Comisión de Fiestas de Alcalá impulsan durante estos días una nueva campaña de difusión y promoción de “este evento de gran interés cultural y turístico para el municipio isorano” según resalta la concejal de Cultura isorana, Lorena Medina. Para ello se ha editado un folleto que distribuiremos a través de las oficinas de información turística del municipio. La campaña está colgada también en la web municipal (http://www.guiadeisora.org/agenda/08-2016/15-de-agosto-noche-de-fuegos-e…) y a través de Facebook, tanto en las páginas del Ayuntamiento como de la propia Comisión de Fiestas de Alcalá, donde incluso puede descargarse el folleto en español e inglés.
Un poco de historia.-
El investigador José María Mesa asegura que en 1925 aparece la primera referencia histórica a esta parte de los festejos. En aquella época, “un bote de pescadores tira fuegos artificiales y avanzaba en paralelo a la costa, hasta que llegaba al final de la muralla” donde se celebraban los bailes. Eran tiempos de los barcos de cabotaje, que tenían en Alcalá una de sus escalas, y de los veraneantes que bajaban de Chío y Guía. Al año siguiente, 1926, también se tirarán fuegos desde un bote y en la zona de la ermita, pero se introduce uno de los grandes aciertos del espectáculo: “también se quemarán bonitos fuegos de artificio en el risco llamado Baja de Afuera” según recogía el programa de las fiestas de ese año.
Las fiestas incluían los denominados «paseos con música» o los bailes con pianola, celebrados supuestamente en la muralla, que es la zona elevada junto al embarcadero, hoy calle La Muralla. Uno de aquellos barcos de cabotaje, conocido como «el vapor Virgen del Carmen», hacía un viaje extraordinario a La Gomera y volvía con personas que venían «especialmente» a la Fiesta de Alcalá. Los fuegos eran realizados por José y Manuel Rodríguez Alonso, pertenecientes a una familia de afamados fogueteros de Guía de Isora.
Los fuegos de Alcalá fueron novedosos desde el principio, aunque su gran impulso lo alcanzan con el desarrollo de zonas turísticas en municipios vecinos. Hoy resulta difícil ver los fuegos desde Alcalá si no se viene varias horas antes.
Lo que cuestan estos fuegos es uno de los secretos mejor guardados por las diferentes comisiones de fiestas. Como regla no escrita de los últimos años, especialmente las últimas dos décadas, los fuegos suponen alrededor de la tercera parte del presupuesto de los festejos. Según ha reconocido la Comisión de Fiestas, “este año suponen un 25% del presupuesto de los festejos”. Conseguir ese dinero significa año tras año un gran esfuerzo, pidiendo casa por casa, comercio por comercio, organizando eventos, etc.
Los fuegos han crecido en cantidad, calidad y espectáculo, pero mantienen el mismo esquema desde hace unos 50 años. Su encanto está en el escenario, integrado por las bajas de lava volcánica, el embarcadero y la muralla, y en que se tiran al mismo tiempo desde distintos puntos. Si el estado de la mar es bueno, está despejado y corre algo de brisa, la exhibición alcanzará su máximo esplendor.
