Al acto de inauguración asistió el alcalde, Pedro Martín, y la concejal de Urbanismo y Obras, Mercedes González.
En los pasados días quedó inaugurado oficialmente el registro de la propiedad de Guía de Isora en el núcleo de Alcalá. Al acto de inauguración, celebrado el pasado viernes 19 de octubre, asistió el alcalde de la localidad, Pedro Martín, y la concejal isorana de Urbanismo y Obras, Mercedes González.
La oficina, que dispone de unos 200 metros cuadrados de superficie, se encuentra en la primera planta del edificio Alcalá Center, en el bloque 1, portal 3, situado en la Avenida Los Pescadores, justo al lado de la notaría del municipio, lo que redundará en un beneficio para los ciudadanos al estar muy relacionados los trámites que en ellas se realizan.
El registro de la propiedad, una vieja aspiración del Ayuntamiento de Guía de Isora y del propio alcalde Pedro Martín desde el inicio de su mandato en 1995, por fin es ya una realidad, y se encuentra abierto al público de lunes a sábados de 9 a 14 horas, y de lunes a viernes también por la tarde de 15 a 17 horas. El principal beneficio para los isoranos con este nueve servicio será que ya no tendrán que desplazarse hasta el municipio vecino de Adeje para realizar trámites propios de los registros de la propiedad.
El titular de la oficina, Miguel Ángel González Garrós, indicó que su intención ha sido contar con un registro moderno, abierto y lo más accesible al público en general e indicó que “si al registro de la propiedad le van bien las cosas, será reflejo de una sociedad y economía prósperas”. González Garrós auguró un futuro esperanzador al municipio, que definió como “una perlita”.
Pedro Martín señaló que “el mejor termómetro de la situación económica de una sociedad” se mide con la actividad que se encuentra en una notaría o en un registro de la propiedad. El alcalde indicó que “la apertura de esta oficina es una buena noticia, y estamos necesitados de ellas”.
Funciones del registro de la propiedad
Los registros de la propiedad son un registro civil, de carácter oficial, en el que se pueden inscribir para posterior verificación pública, los derechos de propiedad sobre los bienes inmuebles, así como todos los demás derechos reales que recaigan sobre ellos.
La principal función de un registro de la propiedad es dar información fiable a los ciudadanos a la hora de realizar contratos que impliquen disposición sobre los bienes inscritos. De esa forma, un comprador que quiera adquirir una finca o bien inmueble, podrá comprobar en dicho registro su estado para asegurarse de que el vendedor es el verdadero propietario, de que el bien está libre de cargas que puedan reducir el valor de la propiedad o de cualquier otra circunstancia registrada con la misma.
Algunos derechos reales, como la hipoteca, suelen ser de obligatoria inscripción para poder hacerla valer frente a terceros.
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